El descubrimiento de América el 12 de octubre de 1492, el primer viaje de Colón a las Indias. Justo en la noche del 11 al 12 de octubre de 1492 se dio el grito de "¡Tierra!", y la historia de Europa y de América cambió de manera irreversible. Así descubrió Cristóbal Colón el posteriormente llamado "Nuevo Mundo"
Colón en la corte de Fernando el Católico
Xilografía según un óleo de Wenzel Von
Brozik. Siglo XIX. Gracias a su seguridad en
sí mismo y su entusiasmo visionario, Colón
persuadió a los Reyes Católicos de aceptar
su proyecto, aunque nada habría logrado sin
el apoyo decidido de varios personajes clave
de la corte castellana. En la negociación
final, Colón exigió que se le concediera el
título hereditario de Almirante del Mar
Océano, el cargo de virrey y gobernador y el
diez por ciento de las ganancias del
descubrimiento. Cuando los consejeros de
Isabel consideraron que eran condiciones
desorbitadas, Colón partió airado a Córdoba,
pero la reina lo volvió a llamar y el 17 de
abril de 1492 se firmaron las
capitulaciones.
El Tratado Colombino
Las Capitulaciones de Santa Fe fueron pactadas y firmadas por fray Juan Pérez, representante de Colón, y Juan de Coloma, secretario de Fernando el Católico. Se trató de un documento suscrito por sus majestades el 17 de abril de 1492 en la localidad de Santa Fe, a las afueras de Granada, y que recoge los acuerdos alcanzados con Cristóbal Colón relativos a la expedición que se planeaba hacia el desconocido occidente.
La ruta hacia el
nuevo mundo
Carta náutica atribuida a Cristóbal Colón
Desembarco de Colón de Dióscoro Puebla
Primer desembarco de Cristóbal Colón en
América, óleo de 1862 de Dióscoro Teófilo
Puebla (1831-1901), en el Ayuntamiento de La
Coruña.
La Española, 1493
Bosquejo de la costa noroeste de la isla
Española (actual Haití), posiblemente
realizado por Cristóbal Colón o alguno de
sus tripulantes hacia el final de su primer
viaje a las Indias, en enero de 1493.
Cristóbal Colón
Azulejos en la plaza de España, en Sevilla,
con la imagen de Isabel I de Castilla y
Fernando II de Aragón, los Reyes Católicos,
en el momento en que reciben a Cristóbal
Colón tras su viaje a las Indias.
Los Reyes Católicos reciben a Cristóbal
Colón
En abril de 1493 Cristóbal Colón fue
recibido por los Reyes Católicos en
Barcelona. No se sabe con certeza el día en
que el almirante entró en la ciudad, aunque
probablemente fue a finales de abril.
Tampoco se sabe el lugar exacto en el que
fue recibido; pudo ser en el Salón del
Tinell, en el centro de Barcelona, o en el
monasterio de San Jerónimo de la Murtra, en
Badalona; puede incluso que visitara ambos
lugares.
Los Reyes reciben a Colón en Barcelona
Un cronista explica que, a la llegada de
Colón a Barcelona a mediados de abril de
1493, «los Reyes Católicos le esperaban
públicamente, con toda la majestad y
grandeza, en un riquísimo trono bajo un
dosel de brocado de oro, y cuando fue a
besarles las manos se levantaron como si
fuera un su lado». Así recrea la escena este
óleo de Francisco García Ibáñez (Museo del
Ejército, Madrid). Sin embargo, los diarios
de la ciudad no registran una recepción
pública. Parece que el encuentro se produjo
en alguna sala de palacio, repleta, eso sí,
de curiosos y admiradores.
Los Reyes Católicos y Cristóbal Colón
Estatuas de los Reyes Católicos y Cristóbal
Colón en el Alcázar de los Reyes Cristianos,
en Córdoba.
Cristóbal Colón
Retrato de Cristóbal Colón conservado en la
biblioteca del Congreso de los Estados
Unidos de América. Copia del siglo XIX a
partir de un grabado de Aliprando Caprioli.
Colón al final de su vida.
Óleo por Claude Jacquand. 1870. Museo de Le
Havre. El navegante y explorador murió en
Valladolid, España, el 20 de Mayo de 1506, a
los 55 años de edad, a consecuencia de un
ataque cardíaco.
Santo Domingo, República Dominicana
Estatua de Cristóbal Colón en Santo Domingo,
en la República Dominicana.
El descubrimiento de América el 12 de
octubre de 1492, el primer viaje de Colón a
las Indias
Ellos no lo sabían, pero su viaje
cambiaría el rumbo de la historia de manera
irreversible. El que había de ser uno de los
viajes más trascendentales de la historia
empezó a tomar forma el 22 de mayo de 1492,
cuando llegó al puesto de Palos de la
Frontera, en Huelva, una carta de los Reyes
Católicos en la que se le ordenaba a la
municipalidad contribuir con dos
embarcaciones a la expedición. Aunque no fue
fácil armar los barcos y reclutar a la
tripulación, Colón pudo echarse finalmente a
la mar el 3 de agosto al frente de tres
naves, la Santa María, la Pinta y la Niña.
Tres naves cargadas de provisiones,
marineros y esperanzas de encontrar una
nueva ruta comercial que cruzara el
Atlántico.
La primera, la capitana, era una nao,
mientras que las otras dos eran carabelas.
Las naos eran barcos de tres mástiles y
velas cuadradas, de tradición atlántica;
pesadas y robustas, resultaban muy aptas
para navegaciones largas. Por su parte, las
carabelas eran más ligeras y maniobrables,
tenían dos o tres palos que se solían
aparejar con velas latinas.
Los principales conocimientos de Colón sobre
el viaje y las distancias que recorrerían se
basaban en dos hechos: uno cierto, la
esfericidad de la Tierra, y otro erróneo, el
tamaño de la misma. De este modo, Cristóbal
Colón pensaba que nuestro planeta tenía una
circunferencia ecuatorial de unos 30.000
kilómetros, es decir, unos 10.000 menos de
los que en realidad tiene.
Así pues, después de hacer escala en las
Canarias, el 6 de septiembre la armada tomó
rumbo al oeste. El almirante calculaba que
la distancia hasta Cipango (Japón) sería de
unas 700 leguas, por lo que cuando se
superaron las 800 sin avistar tierra hubo de
afrontar el descontento de sus hombres,
deseosos de abandonar una aventura que cada
vez parecía más temeraria.
¡Tierra a la vista!
A principios de octubre se vieron bandadas
de aves, y la noche del 11 al 12 de octubre
se dio el ansiado grito de "¡Tierra!". Era
la isla de Guanahaní, bautizada por Colón
como San Salvador e identificada con la
actual Watling, una de las Bahamas. El
navegante siguió su periplo por las islas de
este archipiélago -Santa María de la
Concepción (Rum Cay), Fernandina (Long
Island), Isabela (Crooked Island), etc.-
antes de arribar a Juana (Cuba) el 28 de
octubre. El 6 de diciembre llegó a La
Española. El día 24 del mismo mes la Santa
María encalló a la altura del actual cabo
Haitien y sus restos sirvieron para
construir un pequeño fuerte, bautizado como
Navidad.
Por fin, el 16 de enero de 1493 Colón ordenó
el regreso. Tras superar las Azores y
después de una breve escala en Lisboa, la
armada fondeó de nuevo en Palos de la
Frontera el 15 de marzo. Una aventura que
abrió las puertas de América a los europeos.
Una peligrosa empresa que cambió el mundo,
que cambió la historia para siempre.
Fuentes:
https://www.nationalgeographic.com.es/historia/grandes-reportajes/descubrimiento-america-octubre-1492-primer-viaje-colon-las-indias_10778/12